Tipos de envases de plástico y sus características

Tipos de plástico
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El plástico es uno de los materiales más utilizados en la fabricación de envases, productos de consumo y componentes industriales, dado que su ligereza, resistencia y facilidad de moldeado le confieren gran flexibilidad para adaptarse a diversas necesidades de conservación y transporte. Sin embargo, no todos los plásticos son iguales, sino que cada tipo tiene determinadas propiedades que lo hacen más adecuado para unos determinados usos. 

Para identificar y clasificar los diferentes tipos de plástico, se utiliza un sistema estandarizado a nivel internacional, conocido como Código de Identificación de Resinas (RIC), que los divide en siete grandes grupos. Así, cada envase de plástico lleva impreso un número del 1 al 7 dentro de un triángulo de Möbius, el símbolo internacional del reciclaje, ya que esta clasificación también alude a la facilidad de reciclar el material.

En este post, te contamos cuáles son los diferentes tipos de plásticos y qué características tiene cada uno de ellos, hablándote también de cuáles son sus aplicaciones más comunes.

1. PET: Tereftalato de polietileno

En primer lugar tenemos el PET, un plástico ligero, transparente y muy resistente frente a impactos y a la acción de ciertos gases como el oxígeno y el dióxido de carbono.

Estas propiedades lo convierten en un material ideal en el packaging para alimentación, siendo muy utilizado en botellas de agua y refrescos, así como en el envasado de alimentos. Pero también se usa en fibras textiles, en cuyo caso recibe el nombre de poliéster.

El PET es fácilmente reciclable y es muy común reutilizarlo para fabricar nuevos envases o tejidos. Todo ello hace que sea uno de los plásticos más producidos y utilizados en todo el mundo.

2. HDPE: Polietileno de alta densidad

Con el número 2 está el HDPE, un polímero termoplástico que se caracteriza por su gran rigidez, resistencia química y baja permeabilidad a la humedad. A diferencia del PET, no es transparente sino opaco o semitranslúcido.

Inicialmente era muy utilizado en las tuberías, pero a día de hoy también se usa en botellas de leche, champús, bolsas de la compra, detergentes y otro tipo de productos de limpieza e incluso en juguetes.

Su durabilidad y resistencia lo hacen especialmente adecuado en productos que requieren un material que aguante bien el paso del tiempo, pero sea económico. De hecho, su bajo coste favorece su uso masivo en sectores industriales y de consumo cotidiano.

Además, el HDPE es un plástico reciclable, estando entre los tipos más aceptados en los sistemas de recuperación.

3. PVC: Policloruro de vinilo

Por su parte, el policloruro de vinilo (PVC) es un tipo de plástico muy versátil que se puede presentar de forma rígida o flexible en función de los aditivos que se le incorporen. Destaca por su alta durabilidad, resistencia química y estabilidad, así como por su ligereza y facilidad de modelado.

En su forma rígida, el PVC se utiliza especialmente en la construcción, por ejemplo en tuberías, ventanas, perfiles, marcos, revestimientos de suelos y paneles. También se emplea en la fabricación de envases de productos químicos y alimentarios, como botellas de aceite o blísteres. 

Por su parte, en su versión flexible el PVC se usa en cables eléctricos, mangueras, revestimientos, suelos vinílicos, juguetes, artículos de oficina y productos médicos como guantes, tubos o bolsas de suero, por destacar algunos de sus muchos usos.

Aunque es reciclable, su proceso de recuperación es más complejo que el de otros plásticos debido a la presencia de aditivos.

4. LDPE: Polietileno de baja densidad

El plástico número 4 es el LDPE, un material flexible, ligero y resistente al desgarro, algo que lo hace ideal para envoltorios. De hecho, es uno de los tipos de plástico más utilizados en la fabricación de bolsas de supermercado, envases flexibles, recubrimientos y botellas.

Aunque es menos rígido que el HDPE, es más moldeable y adaptable a diferentes usos. También es reciclable, especialmente en bolsas de plástico, aunque requiere sistemas especializados de separación.

5. PP: Polipropileno

En cuanto al polipropileno, es un termoplástico muy versátil y ligero, con una excelente resistencia térmica y química. Puede soportar temperaturas elevadas sin deformarse, una característica que lo convierte en el material perfecto para envases reutilizables y muebles de exterior, entre otros. También se caracteriza por su dureza y su impermeabilidad.

Dadas sus propiedades y su bajo coste, es un material fundamental en múltiples sectores, desde el alimentario hasta el automotriz y el sanitario. Se utiliza en tapones, pajitas, envases de yogur, piezas de automoción, textiles no tejidos, juguetes y productos médicos. 

Aunque es reciclable, el proceso es más complejo que con otros tipos de plásticos.

6. PS: Poliestireno

El poliestireno (PS) es un plástico económico y fácil de moldear, muy utilizado en envases y cubiertos desechables, comida para llevar y embalajes de productos electrónicos.

Al ser un plástico ligero, tiene una baja resistencia a impactos, y además se degrada fácilmente con la exposición prolongada al sol. De hecho, a temperaturas superiores a 80º libera productos químicos nocivos, por lo que el proceso de reciclaje debe hacerse con cuidado y es más complejo y costoso que el de otros plásticos.

7. Otros plásticos

Por último, esta categoría engloba otros tipos de plástico que no se incluyen en los seis grupos anteriores, como el policarbonato (PC), la poliamida (PA) o nylon, el acrilonitrilo butadieno estireno (ABS), el metacrilato (PMMA) y los bioplásticos.

Estos materiales se usan en CD’s y DVD’s, productos médicos como jeringuillas, gafas de sol o piezas electrónicas, pero pueden contener sustancias peligrosas para la salud, como el BPA, por lo que, salvo excepciones, no se utilizan en alimentación.

Dada la versatilidad de este grupo y la frecuencia de componentes tóxicos en ellos, suelen ser plásticos muy difíciles de reciclar.

¿Para qué se pueden necesitar envases de plástico?

Como has podido ver a lo largo del post, los diferentes tipos de plástico se usan en industrias muy diversas, aunque por supuesto deben ser utilizados por profesionales debidamente certificados. 

En este sentido, las empresas que necesiten soluciones profesionales de envasado y manipulado de productos de diferentes sectores pueden acudir a servicios de manipulados industriales en Zaragoza, como el que ofrecemos en Fundación Rey Ardid, para garantizar la máxima seguridad, eficacia y adaptabilidad a cada tipo de producto.

Así, las principales aplicaciones del plástico son:

  • Alimentos y bebidas: garantizan frescura, higiene y durabilidad, evitando la contaminación y prolongando la vida útil de los productos perecederos.
  • Medicamentos y material sanitario: aseguran esterilidad y seguridad en fármacos, blísteres, sueros y dispositivos médicos.
  • Productos de higiene y limpieza: resisten agentes químicos y contienen de forma segura detergentes, desinfectantes y jabones líquidos.
  • Cosmética y cuidado personal: se utilizan en envases para cremas, champús, geles o perfumes.
  • Industria y automoción: se emplean en embalajes que protegen piezas y componentes durante el transporte o el almacenamiento.
  • Logística y transporte: permiten fabricar cajas, bandejas, films protectores y envoltorios que aseguran las mercancías en viajes largos.
  • Agricultura: se usan en envases para fertilizantes, productos fitosanitarios, semillas o productos destinados a la protección de cultivos.
  • Construcción: facilitan el embalaje y la distribución de materiales como adhesivos, pinturas, selladores o cementos especiales.
  • Electrónica y tecnología: protegen dispositivos, cables y componentes sensibles frente a los golpes o la humedad.
  • Hostelería y restauración: se utilizan en envases desechables y recipientes para comida preparada, garantizando tanto la higiene como la facilidad de transporte.
  • Química e industria pesada: contienen sustancias corrosivas o peligrosas de manera segura gracias a su resistencia química.